El edificio de la residencia es un ejemplo de la arquitectura funcional de los años 80, con volumetrías muy marcadas que dialogan espacialmente con el entorno, texturizando sus envolventes mediante el ritmo de huecos y antepechos. Los ejes de las antiguas escaleras auxiliares internas se marcan en los puntos distales de la construcción definiendo prismas semicilíndricos que armonizan con la composición suavizando los matices compositivos.
11.800 m²
2020