Estación de Autobuses (Ávila)

About This Project

El proyecto consigue un edificio con carácter emblemático que muestra a la ciudad su cara más amable y representativa a la vez que oculta la parte industrial y de trabajo de la Estación, generando además un nuevo espacio urbano que se integra en el circuito peatonal de la ciudad y que la conecta fácilmente y sin forzar soluciones con el nivel de la Estación de ferrocarril.

Permanece como referencia la imagen de los depósitos metálicos de combustible que existieron en el lugar en tiempos pasados, mientras las líneas curvas inclinadas y convergentes de la fachada sugieren la idea de movimiento inherente al concepto del transporte.

La propuesta genera una zona comercial en la propia Estación y una zona de oficinas externas para su gestión independiente, así como las plazas de aparcamiento necesarias para el cumplimiento del PGOU.

Parte de la concepción espacial inducida por el programa de una Estación de Autobuses y la optimización del acuerdo espacio-función-energía-sostenibilidad, basada en la relación íntima con el entorno ambiental, con el que se relaciona en coexistencia positiva para el beneficio común. Mantiene en su lugar el emblemático ejemplar de conífera existente en la actualidad y procura minimizar el impacto ambiental de la construcción aplicando criterios de sostenibilidad, recuperando a la vez para el uso ciudadano un espacio degradado por el paso del tiempo.

Desarrollamos una solución orgánica, con circulación unidireccional definida por el giro natural de los autobuses. El proyecto plantea el alejamiento de los ruidos y molestias producidos por los talleres, previendo la posibilidad de la ampliación del número de dársenas sobre el espacio de aparcamiento.

Se proyecta un cuerpo principal de edificación en cuatro alturas, formado por tres volúmenes, con su frente principal expuesto al sur, de manera que crea una plaza entre él y la carretera, generando un espacio urbano exterior sin rampas peatonales desde el que se accede a la Estación, y aloja las plazas de aparcamiento necesarias para el funcionamiento normal de la misma.

Una cubierta vegetal inclinada que nace de la acera de la rotonda exterior este y sube en suave pendiente hasta el nivel de las vías de ferrocarril, pasa sobre la edificación, generando un paseo peatonal a través de un parque ciudadano.

Un cuerpo secundario situado atrás contiene la nave de servicios, en una sola altura, que se cubre con una cubierta vegetal plana que también cubre el aparcamiento de autobuses que es abierto.

La plaza delantera exterior contiene una zona peatonal que dialoga con la ciudad, de tamaño suficiente para gestionar el movimiento de viajeros, visitantes y transeúntes. La zona de aparcamiento que hay en la plaza, en fondo de saco, contiene la parada de Taxis, el aparcamiento de vehículos de usuarios de la Estación (con reserva para discapacitados) y una zona de carga y descarga, y se derrama hacia el este penetrando progresivamente en el terreno para minimizar el impacto visual de los vehículos aparcados, parte de los cuales quedan bajo la cubierta vegetal. Hay también una zona de aparcamiento de bicicletas.